Sí, sí... Las puertas de los dormitorios infantiles hablan. ¡Qué digo hablan! ¡GRITAN! ¿Que no? Si tienes un peque en tu casa es imposible que digas que no...
Es totalmente normal y natural que los niños, llenos de entusiasmo y energía desbordante griten, corran, den portazos y cierren cajones de golpe. No lo hacen a propósito; es cosa de la edad.
Lo cierto es que el avance técnico en los herrajes para muebles infantiles permite incorporar guías con retención que frenan los golpes bruscos que se producen para cerrar las puertas y cajones (los muebles temáticos no se salvan, no son mágicos; también se golpean...).
La cuestión es que, a pesar de tener todos los muebles de la habitación infantil preparada para golpes, siempre nos queda la puerta. ¿Qué hacemos con la puerta del dormitorio? Entre los artículos de puericultura podemos encontrar gomas y topes para las puertas que evitan el golpe y, de paso, que se cierre la puerta. El inconveniente que veo es que muchas veces no son muy estéticos y, especialmente si tenemos una habitación infantil temática, más original, normalmente no hace juego con su decoración creativa.
Sin embargo, el otro día vi una idea muy buena: consiste en coger un trocito de tela acolchada y coserle en las puntas dos cordeles para engancharlos en cada uno de los picaportes de la puerta. Así:
La idea es muy buena porque, además de ser muy útil, puede quedar muy decorativo. ¿Imaginas que tienes muebles infantiles de dibujos animados? Pues personalizas la tela con esos personajes y punto... Además, puedes hacer diferentes modelos para ir cambiando la decoración e incluso preparar uno para cada puerta del hogar, que siempre va bien... Así protegemos los muebles, evitamos los ruidos y decoramos. ¡Todos contentos!
¡Manos a la obra!
Imagenes de
bebe-blog.org
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