En nuestra decisión de comprar un sofá, un sillón, un chaise longue… tapizado en tela, pueden intervenir factores como el color, el diseño, el tipo de material, el precio… y otros. Pero hay uno que, nuestra experiencia como fabricantes nos dice, que cuando a llega el producto a casa marca la diferencia, y es la facilidad de limpieza, de las tapicerías de tela.
En este post os voy a hablar sobre los distintos tipos de telas que podemos encontrar en el mercado para tapizar nuestro sofá, sofá cama, sillón, butaca, chaise longue, puff… y os daré una serie de consejos para su limpieza y mantenimiento, algunos de carácter general y otros aplicables según el tipo de tapicería.
Debéis saber que hoy en día los fabricantes han mejorado sus técnicas, y elaboran combinaciones y mezclas de fibras -ya sean sintéticas o naturales- que remarcan las mejores propiedades de cada material, dando como resultado telas de grandes cualidades y calidades, a un precio muy asequible. Se pueden encontrar en el mercado desde 4 euros el metro cuadrado hasta más de 80… pero lo más habitual es que cuesten entre 10 y 20 euros el metro cuadrado. Os aconsejamos que, antes de comprar, os aseguréis que son telas resistentes al desgaste y no hagan mucho pilling o bolitas y que tengan certificados de calidad
TIPOS DE FIBRAS PARA TEJIDOS
Las telas para tapicería se obtienen cosiendo una gran cantidad de hilos que pueden ser naturales, artificiales y combinaciones de ambos. A su vez los hilos son fibras textiles que se tuercen conjuntamente, consiguiendo así mayor longitud. Como os he dicho en el párrafo anterior cada una de estas fibras tiene unas propiedades específicas. Son las fibras las que dan nombre a las distintas telas que encontramos en el mercado.
Acrílico
Este tipo de fibra pertenece a la familia de los plásticos transparentes y se caracteriza por su resistencia a la intemperie, soportando muy bien el impacto de los rayos ultravioletas. Además es difícil que se raye, pero no duran tanto como el nylon o el poliéster. Una de sus cualidades más apreciadas a la hora de usarse en tapicería es que, siendo similar a la lana, tiene propiedades anti alergénicas, siendo resistentes a las polillas y hongos. En cuanto a su limpieza es aconsejable que se realice en seco, aunque acepta el planchado.
Algodón
Es una fibra natural que da como resultado telas suaves pero permeables, con una gran capacidad de absorción, por lo que si derramamos líquidos en el sofá, rápidamente serán absorbidos, siendo más difícil su evacuación. Si esto ocurre, no utilizar secadores de pelo o fuentes artificiales de calor, lo mejor es dejar secar de forma natural, pero no exponiendo la pieza a la luz solar directa. Son telas muy resistentes, de gran elasticidad y durabilidad. Para su limpieza lo mejor es realizarla en seco, ya que puede encoger con los lavados a máquina y producirse pérdida de color.
Lino
Al igual que el algodón, es una fibra natural. Tiene más resistencia que éste y reduce la sensación de calor. Además, puede absorber hasta un 20% de agua sin que llegue a humedecerse la superficie. Se puede lavar a máquina con total tranquilidad, aunque es conveniente utilizar programas de lavado a baja temperatura y evitar el centrifugado, ya que puede encoger. Lo mejor para conservar su apariencia y durabilidad, es el lavado en seco.
Nylon
Es una fibra artificial, muy elástica y resistente. Al igual que el algodón tiene propiedades anti alergénicas, resiste las polillas. A la hora de su limpieza, acepta el lavado a máquina y pueden utilizarse detergentes y productos anti manchas, al ser resistente a la abrasión y a la acción de los productos químicos, aunque no aconsejamos abusar de ellos, con el tiempo pueden deteriorar la tela. Una de sus ventajas es que no necesita planchado, al recuperar fácilmente su forma, además seca muy rápido.
Poliéster
Es una fibra artificial, procedente de los plásticos. Entre sus cualidades se encuentra su resistencia al moho, las polillas, la luz solar, la humedad. Su limpieza es muy cómoda, aceptando el lavado a máquina y el uso de detergentes y productos anti manchas, al no afectarle los productos químicos, pero siempre con moderación y cuando las manchas no admitan otra solución. Lo mejor es seguir las instrucciones del fabricante.
Poliuretano
Es una fibra sintética como el nylon. Entre sus propiedades se encuentra la impermeabilidad, por lo que no absorbe los líquidos, la durabilidad y la ligereza. En este tipo de telas es importante seguir las instrucciones de limpieza del fabricante, aunque la mayoría acepta el lavado a máquina y el uso de detergentes. Nuestro consejo es que no los apliquéis en caso de duda. Ya sabéis es mejor prevenir que curar.
PVC
Es una fibra plástica de gran resistencia y durabilidad, resistente a la abrasión. No se quema con facilidad, es un buen aislante eléctrico. Su limpieza es bastante fácil. Simplemente con un trapo humedecido en agua. Se puede usar jabón y se pueden utilizar cepillos en caso de manchas más difíciles.
Seda
Aunque es una de las fibra naturales más fuertes, requiere de cuidados especiales y debemos tener ciertas precauciones como la de evitar su exposición directa a la luz solar, ya que puede amarillearse y estropearse con facilidad. Su textura es suave y lisa y tiene un tacto muy agradable, pero al ser conductora de la electricidad, puede acumular cargas estáticas, teniendo la sensación, al ponernos en contacto con ella, de que nos da la corriente. A la hora de su limpieza es importante seguir las instrucciones del fabricante, al tratarse de una tela delicada. No es una tapicería aconsejable para los alérgicos, al ser vulnerable a la acción de los insectos.
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En este post os voy a hablar sobre los distintos tipos de telas que podemos encontrar en el mercado para tapizar nuestro sofá, sofá cama, sillón, butaca, chaise longue, puff… y os daré una serie de consejos para su limpieza y mantenimiento, algunos de carácter general y otros aplicables según el tipo de tapicería.
Debéis saber que hoy en día los fabricantes han mejorado sus técnicas, y elaboran combinaciones y mezclas de fibras -ya sean sintéticas o naturales- que remarcan las mejores propiedades de cada material, dando como resultado telas de grandes cualidades y calidades, a un precio muy asequible. Se pueden encontrar en el mercado desde 4 euros el metro cuadrado hasta más de 80… pero lo más habitual es que cuesten entre 10 y 20 euros el metro cuadrado. Os aconsejamos que, antes de comprar, os aseguréis que son telas resistentes al desgaste y no hagan mucho pilling o bolitas y que tengan certificados de calidad
TIPOS DE FIBRAS PARA TEJIDOS
Las telas para tapicería se obtienen cosiendo una gran cantidad de hilos que pueden ser naturales, artificiales y combinaciones de ambos. A su vez los hilos son fibras textiles que se tuercen conjuntamente, consiguiendo así mayor longitud. Como os he dicho en el párrafo anterior cada una de estas fibras tiene unas propiedades específicas. Son las fibras las que dan nombre a las distintas telas que encontramos en el mercado.
Acrílico
Este tipo de fibra pertenece a la familia de los plásticos transparentes y se caracteriza por su resistencia a la intemperie, soportando muy bien el impacto de los rayos ultravioletas. Además es difícil que se raye, pero no duran tanto como el nylon o el poliéster. Una de sus cualidades más apreciadas a la hora de usarse en tapicería es que, siendo similar a la lana, tiene propiedades anti alergénicas, siendo resistentes a las polillas y hongos. En cuanto a su limpieza es aconsejable que se realice en seco, aunque acepta el planchado.
Algodón
Es una fibra natural que da como resultado telas suaves pero permeables, con una gran capacidad de absorción, por lo que si derramamos líquidos en el sofá, rápidamente serán absorbidos, siendo más difícil su evacuación. Si esto ocurre, no utilizar secadores de pelo o fuentes artificiales de calor, lo mejor es dejar secar de forma natural, pero no exponiendo la pieza a la luz solar directa. Son telas muy resistentes, de gran elasticidad y durabilidad. Para su limpieza lo mejor es realizarla en seco, ya que puede encoger con los lavados a máquina y producirse pérdida de color.
Lino
Al igual que el algodón, es una fibra natural. Tiene más resistencia que éste y reduce la sensación de calor. Además, puede absorber hasta un 20% de agua sin que llegue a humedecerse la superficie. Se puede lavar a máquina con total tranquilidad, aunque es conveniente utilizar programas de lavado a baja temperatura y evitar el centrifugado, ya que puede encoger. Lo mejor para conservar su apariencia y durabilidad, es el lavado en seco.
Es una fibra artificial, muy elástica y resistente. Al igual que el algodón tiene propiedades anti alergénicas, resiste las polillas. A la hora de su limpieza, acepta el lavado a máquina y pueden utilizarse detergentes y productos anti manchas, al ser resistente a la abrasión y a la acción de los productos químicos, aunque no aconsejamos abusar de ellos, con el tiempo pueden deteriorar la tela. Una de sus ventajas es que no necesita planchado, al recuperar fácilmente su forma, además seca muy rápido.
Poliéster
Es una fibra artificial, procedente de los plásticos. Entre sus cualidades se encuentra su resistencia al moho, las polillas, la luz solar, la humedad. Su limpieza es muy cómoda, aceptando el lavado a máquina y el uso de detergentes y productos anti manchas, al no afectarle los productos químicos, pero siempre con moderación y cuando las manchas no admitan otra solución. Lo mejor es seguir las instrucciones del fabricante.
Poliuretano
Es una fibra sintética como el nylon. Entre sus propiedades se encuentra la impermeabilidad, por lo que no absorbe los líquidos, la durabilidad y la ligereza. En este tipo de telas es importante seguir las instrucciones de limpieza del fabricante, aunque la mayoría acepta el lavado a máquina y el uso de detergentes. Nuestro consejo es que no los apliquéis en caso de duda. Ya sabéis es mejor prevenir que curar.
PVC
Es una fibra plástica de gran resistencia y durabilidad, resistente a la abrasión. No se quema con facilidad, es un buen aislante eléctrico. Su limpieza es bastante fácil. Simplemente con un trapo humedecido en agua. Se puede usar jabón y se pueden utilizar cepillos en caso de manchas más difíciles.
Seda
Aunque es una de las fibra naturales más fuertes, requiere de cuidados especiales y debemos tener ciertas precauciones como la de evitar su exposición directa a la luz solar, ya que puede amarillearse y estropearse con facilidad. Su textura es suave y lisa y tiene un tacto muy agradable, pero al ser conductora de la electricidad, puede acumular cargas estáticas, teniendo la sensación, al ponernos en contacto con ella, de que nos da la corriente. A la hora de su limpieza es importante seguir las instrucciones del fabricante, al tratarse de una tela delicada. No es una tapicería aconsejable para los alérgicos, al ser vulnerable a la acción de los insectos.
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